Otro caso de intolerancia se presentó nuevamente dentro de TransMilenio. En esta ocasión una mujer golpeó al conductor de un articulado, lo que hizo que él perdiera el control del bus y por poco ocasiona una tragedia.
Según las primeras versiones, la mujer le pidió al conductor que le abriera la puerta en otro vagón, pues no había alcanzado a bajarse cuando el bus se detuvo en la estación Avenida Jiménez; algo que no está autorizado por el sistema de transporte.
Tras ver que el conductor no hizo lo que ella decía, la enfurecida mujer golpeó con una botella al conductor del TM en la cara, motivo por el cual el hombre perdió el control del enorme bus y resultó atravesado sobre dos carriles de la avenida Caracas, justo en frente del Sena.
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Diego Arias, presidente de la red de apoyo del Sitp, dejó ver la afectación que sufrió el bus luego de quedar en medio del separador. Afortunadamente, esa maniobra no ocasionó ningún accidente, pues los otros conductores alcanzaron a frenar a tiempo.
Tras el hecho, la energúmena no fue detenida por las autoridades, ya que según Arias concilió con el operador. Por su parte, la víctima tuvo que ser atendida en un centro médico por la herida en su rostro. Increíble que sucedan este tipo de situaciones.
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