Sobre las 11 de la mañana de este domingo, al teléfono celular de la mamá del taxista José Antonio Zuluaga le entró una llamada de un desconocido que le dijo con voz temblorosa: “¡hubo un accidente! Y su hijo está implicado”. De esta manera comenzó el suplicio de la familia Zuluaga, ya que en ese instante el trabajador de 44 años acababa de ser arrollado por un SITP.
Toda la familia se encontraba ayer a las afueras de la Clínica Nueva (Teusaquillo), acompañando al hombre en su segunda cirugía. Además de rezar por su alma y recuperación, sus familiares no dejaban de pedir justicia a las autoridades, ya que el accidente, según dicen ellos, fue responsabilidad del conductor del bus de transporte público.
Inaudito siniestro
Con las lágrimas en sus mejillas, la familia de este luchador le contó ayer a Q’HUBO su historia. María Bernal, sobrina de José, es una de las que está al frente de la recopilación de las pruebas que necesitan para que se haga justicia.
“Mi tío estaba estacionado pegado al andén (del barrio Siete de Agosto sobre la Carrera 29B con Calle 36). Como allá hay tantos talleres de carros, él se encontraba por la parte de atrás del taxi revisando las luces traseras de su carro. En ese momento el SITP lo golpeó, mi tío quedó debajo del bus, este lo alcanzó a arrastrar unos metros hasta que le pegó al taxi y hasta ese momento fue que se detuvo y retrocedió”, narró la sobrina de José.
Don José perdió la conciencia inmediatamente. Mientras tanto el conductor del bus azul, dicen, “lo único que hacía era mirar si le había pasado algo a su bus, no se inclinó a ayudar a mi tío después de que cuando lo atropelló fue porque en parte venía discutiendo con otro conductor desde atrás. Él riéndose le dijo a la gente que eso lo iba a pagar el seguro”, agregó la joven.
Cuando sacaron a don José de debajo del SITP, el hombre alcanzó a recobrar la conciencia y mencionó el nombre y número de su mamá, doña María Eligia. Una ambulancia lo trasladó a la Clínica Nueva a donde llegó toda la familia. “Cuando llegamos no le dejaron recibir visitas porque llegó muy malo. Todos quedamos muy tristes en especial sus 4 hijos y otro que no es suyo pero lo adora”, señaló a este diario la madre del taxista.
Piden celeridad
Según le contó el conductor del carro con el que venía discutiendo el señor del Sitp, “él había cerrado al carro particular, el mismo conductor nos dijo que él iba con su familia y por eso él no le siguió la pelea, pero sí dijo que el bus se había pasado un semáforo en rojo y todo”.
En el hospital, el taxista “llegó con una hemorragia interna, tuvieron que retirarle el bazo, el pulmón izquierdo tiene líquido, se lesionó un hombro. El mismo domingo le hicieron la primera cirugía, hoy tuvo la segunda para revisarle las hemorragias. Hubo que ponerle 6 compresas y esperar 48 horas para ver cómo avanza la hemorragia y a ver qué sigue”, señaló la sobrina.
La familia lo único que quiere es que haya justicia en este caso. “No puede ser que nosotros estemos aquí preocupados por la vida de mi hijo que está tan mal y el señor que lo hizo tranquilo con su familia esperando que el seguro pague todo. Queremos que haya justicia”, cerró la madre casi llorando.
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