Conozca detalles sobre la infancia de Juan Daniel Oviedo, candidato a la alcaldía de Bogotá.

En su infancia vivió con su hermano, hermana y abuelo, de quien recuerda los desayunos que le preparaba antes de ir al colegio y los premios que le daba por ser buen estudiante. Un hito en su infancia, que marcó un antes y un después, fue cuando sufrió un corte en la cara que lo obligó a recibir 72 puntos, entre los internos y los externos, lo que lo llevó a tener una cicatriz en forma de “Z” en la cara.

“Estudiaba en un colegio de hombres y me la montaban por todo, por feo o voz de niña”. Fue objeto de apodos como ‘Rataniel’ o ‘Monster’. Sin embargo, para él lo que verdaderamente lo marcaría sería la muerte de su abuelo cuando tenía 10 años, pues padecía cáncer y tomó la decisión de no dejarse ver.

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Cuando falleció, Juan Daniel se encontraba a punto de iniciar el bachillerato y, ante la ausencia de su abuelo y como no socializaba con otros niños, decidió convertirse en el mejor estudiante. En 1991 sus padres se separaron. Para mantenerse económicamente, su mamá se convirtió en vendedora de ropa en un almacén. 

Juan Daniel tenía gran talento con las matemáticas, pero quería ser médico; no obstante, declinó de esa idea porque se escandalizaba con la sangre. Por lo anterior, decidió estudiar Economía, porque “es la mezcla ideal entre lo social y los números”.

Entró a la Universidad del Rosario en 1994, su madre se esforzó y le pagó los primeros cinco semestres, pero debido a su excelente desempeño académico, recibió la beca completa. Mientras estudiaba, comenzó a trabajar en el Departamento Nacional de Planeación (DNP). 

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Una vez finalizó su carrera, vio la oportunidad de hacer una maestría en el exterior y en 1999 se mudó a España. Allí aprendió a escucharse a sí mismo y dejó de lados los estereotipos que había aprendido en Colombia. Luego se mudó a Francia, aprendió el idioma y obtuvo su doctorado. En ese país le tomó el gusto a trotar y patinar. 

Cuando regresó a Colombia y se vinculó como profesor de la Universidad del Rosario, se convirtió en asesor del despacho del Ministerio TIC, asesor externo de la Comisión de Regulación de Comunicaciones, de la Superintendencia de Subsidio Familiar, de la Autoridad Nacional de Televisión, Superintendencia de Puertos y Transporte, y consultor de diversas entidades públicas y privadas, sin dejar la universidad. Finalmente, en 2018 fue asignado como director general del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane). 

Dejó su cargo y en vista del impulso que le dieron las personas en la calle, decidió lanzar su movimiento ‘Con toda por Bogotá’. Por eso hoy Oviedo va con toda por la Alcaldía.

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