Por error, una menor de edad encargada de cuidara cuatro niños, confundió el veneno con harina de trigo y les preparó unas arepas con el raticida.
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Los cuatro niños indígenas, entre los 2 y 5 años de edad, se encuentran recibiendo atención médica en el hospital de San Francisco de Asís, en Quibdó.
Todo parece indicar que la cuidadora se confundió con el veneno porque este se encontraba dentro de una bolsa de arroz, y nadie le dijo que este polvo blanco era una sustancia mortal.
Uno de los pequeños permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos y su estado de salud es delicado. Por su parte, los otros niños continúan en observación.
El pediatra asegura que el veneno para ratas seguirá en el organismo de los menores por lo menos por un mes.
Por: Geraldine Olaya.
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