David Mosquera, un joven que vino desde Popayán a Bogotá en busca de lograr sus sueños, fue hallado sin vida en Teusaquillo, pero su familia sospecha que lo asesinaron. Su cuarto lo encontraron revolcado.
Un mar de interrogantes invaden la extraña muerte de un actor de 27 años que fue encontrado sin signos vitales la madrugada de este domingo en una habitación de una residencia estudiantil ubicada en el barrio Teusaquillo.
Q’HUBO se puso en contacto con Esmeralda, la madre de David Stiven Mosquera Cobo, un joven oriundo de Popayán que decidió venir a Bogotá con la ilusión de cumplir sus sueños, pero que lastimosamente tras casi un año de haber estado en esta gran ciudad, su luz se apagó.
¿Qué pasó? ¿Quién está detrás?, ¿Por qué a él?, son un sinfín de preguntas que hoy rondan entre los allegados de este joven artista, pero pese al dolor y las lágrimas que no paran de brotar, sacan fuerzas y alzan su voz para clamar Justicia.
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“Perder a un hijo es que te partan el alma, es un dolor tan grande que no se lo pueden imaginar. Mi hijo era un muchacho respetuoso, un hombre que dejó huella en cada una de las personas que conoció”, dijo con un profundo dolor Esmeralda.
Extraña muerte
Dicen que el corazón de una madre no se equivoca y eso precisamente fue lo que le sucedió a la señora Esmeralda, cuando un pálpito le decía que algo andaba mal con su hijo David, quien se encontraba a kilómetros de distancia de ella, pues había decidido venirse a la capital a estudiar actuación.
“Mi hijo era licenciado en Etnoeducación de la Universidad del Cauca, se encontraba estudiando en el Sena de Bogotá y ya iba a empezar etapa práctica. El lunes que hablamos me dijo que se encontraba grabando una novela con unos mexicanos llamada ‘Consuelo’. En Popayán hizo varias cosas a nivel actoral”, dijo la madre.
De acuerdo con la mamá de David, él era un joven talentoso, alegre y apasionado por el mundo artístico, pero a su vez era un hijo y hermano intachable. Cuenta que todos los días hablaba con él, pero que el miércoles 3 de mayo fue su última conversación.
“Él me contó el miércoles lo que estaba haciendo, lo de la novela mexicana en la que iba a participar. Al otro día lo llamé pero no me contestaba, pensé en ese momento que estaba ocupado grabando. Ya el viernes me empecé a cuestionar de por qué no aparecía, me empecé a preocupar, me entró la zozobra, ya que con David teníamos conexión mañana y tarde, el día que no podíamos hablar era por algo puntual, pero al siguiente día, muy temprano, me escribía”, apuntó en su relato Esmeralda.
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La angustia sin saber de David fue creciendo en Esmeralda, así que el día sábado 6 de mayo le pidió a un tío de él que lo fuera a buscar a la residencia estudiantil donde vivía, en la Carrera 16 con Calle 33.
“A las 9 de la noche le dije que fuera, pero no le abrieron y ninguna persona allí lo había visto. Le dije a mi hermano que fuera nuevamente, le insistí porque mi corazón de madre me decía que algo había pasado y él estaba ahí”, agregó en el duro relato.
Tras la insistencia de la madre, el tío de David regresó a buscarlo, un amigo de él se asomó por la parte interna de la vivienda a la habitación de él y, según cuenta Esmeralda, alcanzó a verlo tendido en el suelo boca abajo. Cuando ingresaron a la habitación, el muchacho estaba desnudo y ya no tenía signos vitales.
“Llevaba horas de muerto, ya sus deditos se estaban poniendo morados. A él le hicieron algo porque cuando yo llegué a Bogotá, no encontré su celular, ni su portátil, la habitación estaba totalmente desordenada y él era ordenado, uno se da cuenta que algo pasó. Era un buen amigo, nunca le fallaba a sus amigos, estaba dispuesto a servir. Las autoridades se encuentran investigando, su muerte quedó por esclarecer. Yo llegué a Popayán, el cuerpo de mi hijo me lo trajeron aquí ayer como a la una de la mañana, hoy me encuentro en las exequias”.
Agregó la mujer.
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La tristeza embarga a los familiares y amigos de David. Ayer en Popayán se llevó a cabo una conmovedora ceremonia donde le dieron el último adiós. Por el momento el caso se encuentra en investigación, pero se conoció que dentro de la residencia estudiantil donde vivía el joven actor, hay cámaras, que pueden llegar a esclarecer este estremecedor caso.
“Una persona dice que escuchó que estaba revolcando la habitación de David. Nosotros creemos que es un homicidio. Esperamos que se haga justicia. Él era un pelado alegre, amable, incluso hace poco nos invitó a una obra de teatro donde era el actor principal”, apuntó un allegado en la vivienda.
“Él decía que hay que sonreírle a la vida, vivir cada momento. Me decía que si un día le tocara viajar lejos él estaría en las estrellas viéndome”, dijo en medio de su duelo Esmeralda.
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