Han pasado dos meses y medio sin que la familia Jiménez Rozo vea que se haga justicia por el vil asesinato de Andrés David, pues a pesar de que su homicida fue identificado por las autoridades y hay una orden de captura en su contra, este sigue muy campante caminando las calles de la capital.
“Esto ha sido muy duro para nosotros, porque mi hermano lo único que hizo fue meterse a defenderme, a evitar que ese tipo me pegara. A pesar de que hubo varios testigos que observaron cómo fueron las cosas y que hay pruebas, no ha pasado nada y el caso está archivado, olvidado en la Fiscalía”, le dijo a Q’HUBO Paola Jiménez, hermana de Andrés David. El homicida de Andrés David fue su ex cuñado, un sujeto identificado como O. Vargas, quien tras arrebatarle la vida se fue como si nada.
Y como no fue capturado en flagrancia, el proceso en su contra avanza demasiado lento. “Él se escapó después de que asesinó a Andrés. Se instauró la denuncia y el investigador a cargo obtuvo la información que requería para poder dar con el responsable, pero no ha pasado
nada.
A los pocos días que ocurrió todo, ese tipo se presentó con su abogado en la Fiscalía, pero dijo que era inocente y lo dejaron ir. ¡No entendemos por qué!”, agregó la familia. En medio del dolor que sienten las hermanas y los padres de Andrés por su crimen, también deben cargar con la cruz de que no se haga justicia y tengan que ver cómo Vargas sigue su vida tranquila, o al menos así lo han podido averiguar. “Sabemos que sigue libre, que sale y tiene una vida normal; mientras que nosotros tenemos que cargar con la ausencia de nuestro ser querido.
A Andrés lo mató, pero porque se metió a defender a sus hermanas, por nada más”, concluyeron los allegados. Reconstrucción de los hechos…
El crimen se remontan a la tarde del miércoles 8 de diciembre, en una vivienda del barrio
Olivares (en Usme). Una reunión familiar terminó convirtiéndose en una tragedia para
los Jiménez Rozo. Todo empezó cuando una de las hermanas de Andrés empezó a discutir con su pareja sentimental (O.Vargas), con quien llevaba un año de relación.
Dicen que el verdugo comenzó a agredir físicamente a la mujer y, en ese momento, otra de
las hermanas de Andrés se metió para defenderla. En el momento en que empezaron a escucharse los gritos y la algarabía, inició la pesadilla.
“Yo estaba acostada, cuando un familiar llegó a despertarme para decirme que ese man le estaba pegando a mi hermana. En ese momento me levanté para evitar que le siguiera pegando y mi hermano Andrés escuchó y también se paró para intervenir. En medio de la pelea, este tipo sacó un cuchillo, le propinó una herida a Andrés y
Hermanas de andrés
lo mató”
El hecho violento se perpetró en la calle 75C bis con carrera 1, donde vivía la familia Jiménez. De esta zona se llevaron a la víctima hasta un centro asistencial, pero allí llegó sin signos vitales. Mientras esto ocurría, el homicida se escapó.
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