El tío del menor que fue agredido con arma blanca en el colegio Villemar El Carmen sede C, comentó que el niño tuvo una cirugía en el hospital de Kennedy.
Una calmada, pero ruidosa jornada educativa, como las que se suelen vivir en la mayoría de colegios públicos de Bogotá, se vio empañada por la agresión con arma blanca a un menor de 13 años, identificado como Anthony.
Tras este ataque, propinado por una de sus compañeras de clase, el niño se debate entre la vida y la muerte tras el cruento episodio que ocurrió en la mañana del martes, antes de que terminara la jornada escolar.
El acto se presentó dentro de una de las aulas del colegio Villemar El Carmen sede C, ubicado en la calle 20D con carrera 96G, en el barrio Villemar (Fontibón), donde se dictan clases a alumnos de bachillerato. Según los informes, los menores se encontraban discutiendo cuando la agresora, presuntamente, sacó una navaja y le propinó dos heridas: una en la parte baja del abdomen y otra en la ingle. Esta última afectó gravemente la arteria femoral, provocando una hemorragia severa que alarmó a los alumnos presentes, quienes avisaron de inmediato a los profesores.
“Se activó de inmediato el protocolo de atención y el joven fue trasladado al centro médico más cercano, donde está siendo atendido. La familia del estudiante afectado está informada y recibe acompañamiento del equipo docente de la institución, la oficina de convivencia escolar de la Secretaría de Educación, la Alcaldía Local, la Policía de Infancia y Adolescencia, y la Secretaría de Salud”, informó Édgar Javier Vanegas Martínez, rector de la institución.
El niño fue trasladado de urgencia al Centro Médico Fontibón IPS, donde ingresó a cirugía y se le colocó un tubo de tórax debido a la considerable pérdida de sangre. A pesar de los esfuerzos médicos, y tras ser remitido a otros dos hospitales, su estado de salud se deterioró dramáticamente.
“Tras salir de la última cirugía en el Hospital de Kennedy, nos dijeron que mi sobrino quedará en estado vegetativo. Esperamos que las entidades involucradas en estos casos brinden apoyo psicológico y asistencia social a mi hermana para ayudarla a superar este duro episodio”, relató Jhon Buitrago, tío del menor.
Según una fuente cercana a la familia consultada por Q’HUBO, la joven agresora fue aprehendida por las autoridades y, en horas de la tarde del miércoles, se llevó a cabo una audiencia en los juzgados de Paloquemao para esclarecer los hechos que llevaron a su compañero a un estado de muerte cerebral.
“Queremos que los colegios y los padres tomen conciencia y presten más atención. A los colegios se va a aprender, no a llevar armas. No entendemos cómo pudo pasar esto, cómo nos entregan a mi sobrino en este estado tan lamentable. Él amaba el fútbol, era su pasión, y ahora está luchando por su vida en cada suspiro”, concluyó el tío del menor, visiblemente afectado, en declaraciones a los medios de comunicación frente al colegio, donde ocurrió el salvaje ataque.
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