Faltando cinco minutos para las 11 de la noche de este domingo, en una de las barriadas ubicada en la parte alta de la localidad de Ciudad Bolívar, exactamente en el sector de Tres Reyes, un hombre de aproximadamente 30 años fue víctima de un despiadado ataque sicarial que le quitó la vida en cuestión de minutos.

La víctima fue atacada mientras caminaba en vía pública por un sujeto que tras halar el gatillo, incluso, alcanzó a estar en la mira de las autoridades, pero amparado por la oscuridad de la noche se perdió en medio de una zona boscosa y logró escapar impune.

Los hechos…

El hecho sucedió a la altura de la Calle 64A Sur con Carrera 76 cuando ya la mayor parte del vecindario se encontraba en sus casas finalizando la jornada del domingo. De allí el hecho de que existan pocos testigos presenciales que les puedan exponer a las autoridades con veracidad qué fue lo que realmente sucedió cerca de las 11 de la noche de este domingo.

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“Se escucharon un par de disparos, no fueron más de dos, eso sí. Inmediatamente el tipo se escabulló por una zona boscosa que es bien sola y muy oscura, y ahí se le perdió el rastro. La policía lo persiguió un momento, pero no fue mucho lo que pudieron hacer, eso es todo lo que sé, de ahí para allá lo que se ha dicho es puro chisme”, fueron las palabras que un vecino del barrio Tres Reyes le dijo ayer a Q’HUBO a en el lugar donde ocurrió todo.

Pocos minutos después del ataque, varios vecinos dieron aviso inmediato a los uniformados del CAI Santo Domingo para que hicieran presencia urgente en la zona. A su arribo se encontraron con un hombre joven, de unos 30 años más o menos, que yacía herido de muerte en vía pública. Para ese momento el hombre atacado aún presentaba signos vitales, aunque se iban debilitando lenta y constantemente hasta que no resistió más y falleció en el mismo lugar donde fue atacado.

Siguiendo las indicaciones de varios residentes del lugar, las autoridades desplegaron un operativo de búsqueda en el sector que fue apoyado desde el aire por el helicóptero Halcón de la Policía Nacional, pero a pesar de los esfuerzos el sicario que vestía íntegramente de negro logró escapar.

El hoy occiso no llevaba documentación consigo en el momento en que fue hallado. Tampoco se encontraron objetos que dieran luces sobre sus actividades, razón por la cual al momento del cierre de esta edición el hoy occiso todavía permanecía como no identificado.

Para las autoridades, el hecho puede estar relacionado con las disputas a sangre y fuego que se viven en las calles de la localidad por cuenta del control del mercado de drogas y armas en la zona. Que, además, está demarcado por fronteras invisibles que los mismos grupos se han encargado no solo de demarcar sino de vigilar ferozmente cueste lo que cueste.

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