La muerte sorprendió a un hombre de 74 años en la tarde del miércoles. Al parecer, había salido a reclamar su almuerzo en el barrio Alameda (Santa Fe), cuando de un momento a otro se desplomó sobre el asfalto, ante la mirada aterrada de los transeúntes que se desplazaban por esta zona.
Dicen que el hombre estaba reclamando su almuerzo y que de un momento a otro se desplomó. Llegó una ambulancia, pero tristemente ya no había nada qué hacer por él”, contó ayer un vigilante de la zona.
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Los hechos
Q’HUBO pudo conocer que el incidente se registró sobre la 1 de la tarde del miércoles, cuando el parroquiano iba caminando por una de las calles del barrio Alameda. Al verlo caer al suelo, se le acercaron para auxiliarlo, pero para su sorpresa el hombre ya no daba señales de vida.
Inmediatamente, la comunidad hizo el llamado a la línea de emergencia para que le brindaran la atención requerida. Al poco tiempo, una ambulancia llegó a la calle 22 con carrera 13, en toda la esquina donde funciona un jardín infantil. Allí el personal médico le tomó los signos vitales, pero infortunadamente determinaron que su corazón había dejado de latir para siempre y se declaró su deceso.
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El equipo de criminalística hizo presencia en el lugar y se logró identificar al ciudadano como José Antonio Rodríguez Garzón. Por el momento, se desconoce si presentaba antecedentes de fallas cardíacas y solo la inspección al cadáver logrará determinar con exactitud qué produjo su deceso. Entre los moradores se comenzó a especular que le había dado un infarto.
“Vinieron a hacer el levantamiento como a las 4 de la tarde. Al parecer, llegó la familia de él para hacer el acompañamiento… creo que una de ellas era la nuera ”, añadió un vendedor ambulante.
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Entre tanto, los comerciantes y residentes de esta zona quedaron consternados y reflexionaron que a todos nos llegará la hora de partir y rendirle cuentas de nuestros actos al Todopoderoso para pasar el resto de nuestra existencia en la eternidad.
“Por algo dicen que para morir lo único que se necesita es estar vivo”, concluyó un vecino al ver la escena.
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