Mientras Jhon Tapias caminaba tambaleándose por las calles del sector del Perdomo, en Ciudad Bolívar, sosteniendo en su mano derecha una botella de cerveza, dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta lo abordaron y le dispararon sin mediar palabra.
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El hombre de 38 años recibió un disparo en la parte de atrás de la cabeza, que lo dejó tendido en el andén, agonizando y con los trozos de cristal de la botella quebrados, a pocos metros de su mano derecha.
Tras el ataque, Jhon quedó tendido de medio lado, con los ojos abiertos e intentando entender lo que acababa de ocurrirle.
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Minutos después, una patrulla de la Policía llegó al lugar de los hechos y lo subieron al vehículo para trasladarlo al Hospital de Meissen, en donde permanecía, hasta el cierre de esta edición, en la Unidad de Cuidados intensivos.
El señor había estado tomando durante todo el día con un grupo de hombres, como a dos cuadras de donde le dispararon. Escuchamos los tiros y de una llamamos a la policía; ellos llegaron rápido y se lo llevaron. Después llegaron varias patrullas a preguntarle a la gente si habían visto algo, pero la verdad es que pocas personas fueron testigo del crimen”, le manifestó a Q’HUBO un trabajador de la zona.
Todavía se desconoce quién está detrás del intento de homicidio de este hombre, quien se dedica a vender pollo en las calles del barrio y reside en el barrio El Espino (en Ciudad Bolívar), pues sus conocidos aseguran que no había recibido amenazas ni tenía enemigos.
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El ataque se registró a las 5 de la tarde de este domingo, cuando la víctima iba caminando sobre la calle 65 Sur con carrera 71A.
Dicen los habitantes de esta zona que el hombre se despidió de ellos con el fin de irse a dormir, pero solo caminó dos cuadras y fue atacado.
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Los primeros en escuchar los tiros fueron sus conocidos, quienes corrieron a auxiliarlo y a llamar a la policía. Ninguno logró identificar a los gatilleros que le dispararon.
Como si se tratara de un milagro, el comerciante informal permanece vivo y lucha por salvarse.
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