A primera hora de la mañana salió con su traje bien puesto el señor Jesús Orozco Ciro de 62 años de edad. El hombre se detuvo al frente de la línea amarilla que demarca el paradero del Sitp de Fátima en Tunjuelito, a la espera del primer bus de la alborada. Pero el recorrido de este señor se tornó trágico, gracias a un bandido que lo abordó para atracarlo.

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La vida de Jesús se apagó en un hospital cercano a causa de una sola puñalada, otra vida que se pierde a causa de la inseguridad. Quién sabe qué esperaba encontrar el bandido que emprendió el ataque, porque al final lo único que dejó fue una estela de sangre impresionante al frente de un local comercial y no se llevó gran cosa. El ladrón, por su lado, sigue en las calles delinquiendo.

Noticia de muerte…

Quizá con un modus operandi ya conocido, el asaltante eligió una hora desolada de la madrugada. Sobre las 4:50 de la mañana de ayer ocurrió el ataque. Por desgracia los comerciantes de esta cuadra se toparon con una terrible escena de madrugada.

“Yo llegué abrir la tienda como a las 6. Había un poco de policía y tenían un pedazo de cuadra acordonada. Al acercarme un policía me dijo que habían matado a un señor y que estaban investigando. Yo no pude ayudarles porque no vi nada, solo el reguero de sangre”, narró a Q’HUBO ayer un comerciante asustado.

Unidades de la Sijín estuvieron recopilando las cámaras de la Calle 50 sur hasta la 51. En el barrido encontraron una cámara ubicada a las afueras de la ‘Cigarrería de la 50’, la cual captó todo el crimen.

La delincuencia no da tregua…

Las cámaras dejaron en tela de juicio la maldad del delincuente. “Se observa que el señor llegó solo, mucha gente madruga a coger los primeros buses de las 4:30. Un tipo en cicla se acercó al señor, lo abordó y después de unos segundos dialogando se ve un forcejeo y un golpe pero nunca pensamos que fuera tan grave”, relató otro vecino que vio cómo fueron los hechos.

Y es que don Jesús recibió una puñalada en la pierna, solo que la navaja alcanzó a rozarle una vena principal. Para cuando la policía hizo presencia en la Calle 50B Sur con Carrera 36, el sol ya se había asomado y el señor ya estaba dejando esta vida. Aún así los uniformados del CAI Venecia se lo llevaron al Hospital Tunal, donde sus signos vitales se detuvieron para siempre.

Los vecinos solo piden dos cosas esenciales: seguridad y justicia. “Es terrible que pase esto aquí. El barrio estaba seguro desde que abrieron el parque, pero los delincuentes eligen horas tempranas para atacar a los que salen a trabajar. Es una lástima, ojalá agarren al que lo hizo porque seguirá robando por estos lares sin contar que ahora una familia está de luto”, cerró la vecina preocupada.

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