Juan Carlos Rivera Cerón tenía un sueño: pisar tierras estadounidenses para trabajar, ganar dinero y con esto poder salir de deudas y brindarles una mejor calidad de vida a sus tres pequeños hijos y a su esposa. Efectivamente, este bogotano logró llegar a Estados Unidos, pero apenas lo hizo perdió la vida.
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Todavía no es clara la forma en la que Juan Carlos terminó en la morgue de Yuma, en el estado de Arizona (Estados Unidos), aunque lo que hasta el momento le han dicho a sus familiares es que, supuestamente, el hombre de 37 años se habría caído en el momento en que saltó el muro de la frontera para ingresar a suelo gringo.
“Nos llegó primero un correo electrónico en el que nos pedían un documento que demostrara el parentesco de Juan Carlos con nosotros, eso fue la tarde del viernes. En la noche nos llamaron y dijeron que mi hermano estaba muerto, que necesitaban una autorización de nosotros, los familiares, para cremar su cuerpo. Desde ahí la vida nos cambió”, le relató ayer a Q’HUBO Jhon Rivera, hermano de la víctima.
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A pesar de que los Rivera Cerón dudaron sobre la muerte de Juan Carlos, un contacto que tienen en Estados Unidos les sirvió para que les averiguara si era cierto lo que un abogado les había comunicado, primero por correo, y después por teléfono. Efectivamente era cierto.
“No sabemos qué pasó. Nos dicen que se cayó cuando estaba saltando el muro de Mexicali, pero dudamos esta versión porque en el punto donde él iba a saltar, según el plan que tenía, no es alto, no había forma de morir así. Como no hemos podido ver su cuerpo y querían que autorizáramos cremarlo allá, más dudas nos sembró esto”, añadieron los dolientes.
Con el dolor de la pérdida palpitándoles en el corazón, los familiares y allegados de Juan Carlos hoy no solo piden esclarecer su muerte, sino también poder traer el cuerpo de este bogotano, ya que repatriarlo les cuesta $40 millones aproximadamente.
Si desea ayudar a esta familia, puede hacerlo a través de la cuenta de ahorros Bancolombia número 9123036815, que está a nombre de Karen Julieth Sánchez. También podrán llamar a los números 302 4194949, 301 6975521 o al 322 3297598.
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El fin del sueño en Estados Unidos
Juan Carlos trabajaba en la carnicería de su papá, ubicada en el barrio Villa del Río (Bosa), pero a raíz de la pandemia la situación económica se complicó y tuvo que sacar un crédito para comprar un carro y trabajar como conductor de plataformas digitales.
“Mi hermano comenzó averiguar con un conocido que se fue a Estados Unidos por la frontera y le fue bien. Comenzó a hacer todas las vueltas y como no contaba con el dinero, vendió el carro y con esta entrada se fue”, contó su familia.
Viajó la noche del lunes 21 de febrero en un vuelo hasta Ciudad de México y de allí salió hasta Cancún. La última vez que se reportó con sus familiares fue la noche del miércoles, cuando les envió una foto desde el avión que lo llevaba de Guadalajara a Mexicali, en donde cruzaría la frontera.
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Desde esa noche le perdieron la pista. Su deceso, dicen, se presentó la mañana del jueves, pero lo lograron identificar hasta la mañana del viernes y en la tarde ya tenían ubicada a su familia en Bogotá.
Su sueño en Estados Unidos terminó convirtiéndose en una pesadilla para sus tres pequeños hijos de 10, 6 y 2 añitos.
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