César Augusto Hincapié Dávila aseguró que sus hijos no se quitaron la vida. Los hechos ocurrieron en el barrio La Isla de Medellín.
Decir que ha sido difícil reponerse se queda corto para César Augusto Hincapié Dávila, el padre de María Camila y Juan Carlos Hincapié Vélez, los dos jóvenes de 21 y 17 años que fueron encontrados envenenados junto con su madre, Diana Vélez, en su vivienda del barrio La Isla el pasado miércoles.
El hombre, quien migró hace dos años a Las Bahamas, rompió el silencio y, a través de un comunicado, habló sobre las dudas del caso y el tremendo dolor que le ha causado esta situación.
- Puede ver: Nuevos detalles en caso de familia envenenada: Encuentran carta para la novia del hijo menor
En el documento Hincapié se reafirma sobre la versión de que los jóvenes no habrían querido quitarse la vida.
“Me veo en la obligación de pedir prudencia y paciencia hasta conocer las pesquisas de Medicina Legal que, con certeza sé, llevaran a la conclusión de que mis hijos no se quitaron la vida, algo de lo que como padre estoy seguro”, afirmó.
Y es que, desde que se conoció que madre e hijos habían muerto por envenenamiento por cianuro, las autoridades han manejado la hipótesis de que Juan Carlos y María Camila habrían ingerido el veneno de manera voluntaria.
Las dudas
Por el momento se conoce una carta, enviada por la madre a la novia de su hijo Juan Carlos y un mensaje de texto enviado al padre, que serían las “pruebas” que tienen los investigadores para declarar esto un suicidio colectivo, pero los familiares afirman que hay muchos cabos sueltos.
“Siento mucho hacerla pasar por esta situación, pero no podía dejarlos abandonados y sufriendo día a día con el suicidio de su madre”, dice el escrito dejado a la novia de Juan Carlos por parte de Diana.
César Augusto afirmó que sus hijos eran jóvenes aplicados, amorosos y, sobre todo, con grandes sueños para su futuro.
“Los conocí bien en cada una de sus facetas y sé que ellos deseaban cumplir las metas de su futuro más que cualquiera”, dijo Hincapié
Finalmente, expresó que ha sido sumamente complicado enfrentar la situación, sobre todo lejos de su familia, pues no pudo viajar de vuelta a Colombia para despedir a sus niños, quienes fueron enterrados en Pereira, de donde son oriundos.
“No hay palabras ni actos que logren describir el dolor y el desconcierto por la trágica muerte de mis hijos, quienes eran muchachos excepcionalmente juiciosos, cariñosos, estudiosos y felices, pero, sobre todo, llenos de vida y sueños”, concluyó el padre de familia.
Redacción Q’HUBO Medellín
Elija a Q’HUBO Bogotá como su fuente de información preferida en Google Noticias aquí
¿Qué tal le pareció este contenido?
¡Haga clic en una estrella para puntuar!
Promedio de puntuación 5 / 5. Recuento de votos: 1
Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sea el primero en puntuar este contenido.