Los terribles momentos de angustia y dolor que vivieron los residentes del barrio Chuniza, en la localidad de Usme, en la tarde del 28 de diciembre del año pasado no podrán ser borrados de sus memorias, y menos luego de enterarse que tras la explosión que se registró, la pareja que resultó afectada falleció.
La explosión…
Pasadas las 4 de la tarde de ese día, el sonido de una fuerte explosión alertó a los residentes de la Calle 88 Sur con Carrera 7, cuando salieron a mirar se dieron cuenta que los vidrios de varias viviendas se habían roto, y una pareja salía pidiendo ayuda con sus prendas de vestir desgarradas y sus pieles quemadas.
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“Se escuchó un bombazo terrible, me asomé por la ventana y se veía como aire, pero no era como tal humo porque no se incendió nada, rompió los vidrios de la casa del frente. Yo salí corriendo, llegué allá y estaban los dos adultos que vivían allí, el señor gritaba, lloraba desesperado, salió todo quemadito y la chica peor, totalmente quemada”, relató en medio de la tristeza una de las vecinas.
Impactados los vecinos, sin saber cómo ayudarlos para aliviar el dolor que estaban sintiendo, hicieron el llamado a la línea de emergencia para reportar la terrible situación.
En esta vivienda también vivían las tres hijas de la pareja, que fue identificada Johan Sisa Díaz (41 años) y Angie Liseth Castrillón (36 años), por fortuna, las pequeñas se encontraban en el segundo piso y la explosión no les afectó, pues esta se dio en el primer piso.
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Dentro de las hipótesis que manejan los dolientes, pues aún no hay un reporte oficial, la explosión se habría registrado por, presuntamente, una acumulación de gases.
“La pareja estaba trabajando, tenían un tallercito de chanclas que hacían y vendían para poder sostener su hogar. Creo que estaban pegando las suelas, cuando explotó algo, no se sabe qué fue lo que sucedió, pero en todo caso fue algo terrible”, puntualizaron los vecinos.
Al lugar llegó Bomberos, la Policía y unas cuatro ambulancias para atender la emergencia. Mientras el lugar fue acordonado ante la mirada de los vecinos que miraban con sus ojos entristecidos lo sucedido, Johan y Angie fueron trasladados al Hospital Simón Bolívar con quemaduras de tercer grado.
“A cada uno lo subieron a una ambulancia, nos enteramos que el martes murió ella y el miércoles murió él, hasta el momento no los han entregado. Las niñas ahora están con la abuelita materna”, agregó la comunidad.
Tristemente el dolor ronda entre los familiares, allegados y vecinos de esta familia, pues esta semana la pareja partió de este mundo.
Q’HUBO conoció que la familia de las víctimas buscaron ayuda económica para poder costear los gastos, pero este medio se enteró al cierre de esta edición que ya contaba con el dinero para darles cristiana sepultura.
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