Vistiendo un camuflado verde aceituna y cargando un fusil de asalto mientras que sus ojos azules analizan el campo de batalla de su querida Ucrania, así han sido los últimos días de Anastasia Lenna, la hermosísima modelo, actriz y presentadora cuya imagen ha dado la vuelta al mundo en medio del horror de la invasión que este país sufre por cuenta de la de la ambición de Vladimir Putin y Rusia.

De manera admirable, esta mujer de 31 años ha decido, al igual que miles de ucranianos, ponerse al servicio del ejército para hacerle frente a la superpotencia euro asiática, con una pequeña diferencia: más allá de ser una cara bonita, ella tiene un amplio recorrido dentro de las fuerzas especiales de su país.

Una valiente modelo Anastasia Lenna nació en 1991 en Kiev, la capital ucraniana que por estos días resiste los intentos de toma por parte de los invasores rusos. Toda su vida la pasó en la capital y mientras estudiaba en el colegio sus padres notaron que ella estaba fascinada con los concursos de belleza, por esta razón a los 13 años la motivaron para iniciar su carrera como modelo.

Los años pasaron y la joven y hermosa Lenna entro a la Universidad Slavistik (Kiev), donde se graduó como profesional en marketing y administración, y aunque en Ucrania el servicio militar no es obligatorio para mujeres, Anastasia se animó a ingresar al ejército, donde duró un par de años y recibió entrenamiento militar.

Persiguió su sueño

Luego abandonó la milicia atraída por su profesión, llegando a trabajar como gerente de relaciones públicas en las ciudades de Bodrum, Ankara y Estambul (Turquía), en esta última ciudad su belleza deslumbró a tal punto que le dieron la oportunidad de presentar un programa de música llamado ‘World TOP 10’ en el canal ‘Genç TV’.

Durante este tiempo se dedicó a cultivar sus conocimientos a tal punto que aprendió cinco idiomas y ha trabajado como traductora, pero además dedicaba tiempo libre a su hobbie favorito, ‘airsoft’, un juego militar en el que se simulan operativos tácticos y en los que siempre sacaba a relucir sus habilidades.

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Por las palabras de admiración que despertaba por sus encantos, con apenas 24 años, se presentó y ganó el certamen de Miss Grand Ucrania en 2015, y al año siguiente fue la señorita Ucrania Supranacional. Ambos concursos le abrieron muchas puertas a Anastasia quien es reconocida en su país como una talentosa modelo y actriz que solo en Instagram suma más de 240.800 seguidores.

Pero a raíz de las acciones bélicas que Rusia emprendió hace seis días Anastasia dejó de lado los tacones, el maquillaje y los vestidos para lucir su figura escultural, ha montado una tienda de campaña en un parqueadero Kiev desde donde está preparada para la guerra.
Allí ha usado sus redes sociales para mostrarse con su metralleta AK-47, mover campañas de ayuda para los refugiados y animar a otros tantos que están activamente en el frente de combate.

El mensaje que ella promueve es contundente: “¡Cualquiera que cruce la frontera de Ucrania con la intención de atacar será asesinado!”.

Bellísima!

Altura: 175 centímetros.
Peso: 52 kilogramos
Medidas: 33 de busto, 26,5 de cintura y 38,5 de caderas.
Cuando Anastasia partició en su primer reinado, hace siete años, Ucrania y Rusia llevaban un año de conflictos, en ese momento declaró que “hay que parar la guerra, nuestromundo nos necesita. Tantos conflictos son inútiles”.

Negociación: con las Cartas sobre la mesa

Continua la incertidumbre por cómo terminará el conflicto entre Rusia y Ucrania, países que ayer tuvieron un primer encuentro de negociaciones en Bielorrusia, donde los delegados de cada nación expusieron las exigencias para detener la avanzada militar. Por parte de Rusia se exigió el reconocimiento de la península de Crimea como territorio ruso y la desmilitarización de Ucrania.

Entre tanto, el gobierno de Kiev solicitó el cese al fuego y la retirada de las tropas rusas. A la par de las negociaciones que se extendieron por más de cuatro horas, aumentaron las sanciones de países occidentales a tal punto que 28 países de Europa y Estados Unidos prohibieron la circulación de aviones rusos en su espacio aéreo y la bolsa rusa se desplomó por las sanciones al Banco Central de Rusia. Las confrontaciones han bajado de intensidad, esto mientras ambas partes se comprometieron a una segunda ronda de negociación tras hablar con los presidentes.

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