Es común escuchar entre los relatos de vigilantes que han sido testigos de episodios paranormales durante sus rondas nocturnas, sobre todo cuando se encuentran solos y deben custodiar inmuebles antiguos.
El más reciente hecho lo experimentó José Navarro, quien el pasado 28 de junio observó sobre las 11:28 p.m. una sombra que se movía en el parqueadero del edificio Claudia II, el cual fue construido hace 35 años en Santa Marta.
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Según su relato, no es la primera vez que esto le ocurre, pues en una ocasión le tiraron al piso un termo lleno de tinto y varias veces ha escuchado pasos y ruidos extraños mientras se encuentra solo.
“Se me hizo muy raro lo que estaba viendo, así que decidí retroceder (el video de la cámara de seguridad) y volverlo a ver. En ese momento confirmé que se trataba de algo fuera de lo normal y lo grabé con el celular para mostrarlo a los demás”, contó Navarro a medios de comunicación locales.
El video de la extraña aparición se viralizó en redes sociales y más de uno coincide que se trataría de un fantasma. Por esta razón, los trabajadores del lugar pedirán que lleven a un sacerdote para que ore y haga una limpieza espiritual.
Q’HUBO contactó al padre Cristian Piedrahíta, experto en investigaciones paranormales, para entender por qué ocurren este tipo de fenómenos y qué debemos hacer en caso de ser víctimas de las almas en pena.
¿Por qué ocurren este tipo de fenómenos en inmuebles antiguos?
Porque tienen mucha historia y han pasado muchas personas por allí. Nosotros dejamos siempre energía residual, que son nuestras emociones y dejamos ciertas vibraciones energéticas. Con el paso de los años es común que esa energía quede en los espacios y se perciba como sombras, pesadez y demás. Ya cuando ven a una persona que camina en el espacio o aparece de repente se habla de una entidad, que es una energía con conciencia.
¿Por qué quedan estancados en estos lugares?
Puede ser alguien que murió en ese espacio, o alguien que trabajaba o vivía allí y su espíritu quedó pegado, por decirlo así. Pueden ser muchas las razones por las que una entidad se queda en un espacio. Casi siempre se encuentran en lugares antiguos porque muchas personas pasan por allí.
¿Qué hacer para que esas presencias se vayan?
Siempre es importante que sea diagnosticado por un experto, una persona que sepa del tema, como un sacerdote o parapsicólogo. Ellos deben ir al lugar para saber qué tipo de energía es, porque no todas las energías se manejan igual. En algunos casos basta con una limpieza, pero en otros toca ayudar a trascender a esos espíritus o expulsarlos.
¿Y si se trata de una limpieza casera?
Depende de las creencias de cada quien. Yo, desde mi enfoque, recomiendo el agua bendita o exorcizada, preferiblemente. Rociar el agua exorcizada, al menos una vez al día y durante tres semanas, en los espacios contaminados. También funciona el incienso exorcizado y ahumar los espacios. Normalmente esto se hace cuando la vibración de las personas es alta, porque es un lugar donde se generan discusiones o malos comportamientos y la energía queda sucia. El aceite y la sal consagrados también sirven para ungir las puertas y poner en los marcos de las ventanas para proteger los espacios.
¿Qué hacer en caso de ser testigos de esos espíritus?
Lo primero es invocar a Dios, como fuente de la luz y protección divina. Y desde mi experiencia recomiendo la invocación del arcángel San Gabriel, que es el protector, e invocar a nuestro ángel de la guarda para que nos cubra de esas energías externas. Esto ayuda mucho para apartar aquello que nos quiere hacer daño.
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