El siglo XXI les trajo a los pacientes y al personal de la salud del mundo una herramienta inesperada: los celulares.

Hoy les explicamos cómo funcionan algunas apps para estar atentos a nuestra salud. 

Usadas también para mirar el pulso o la presión arterial. 

Monitorear el ritmo cardíaco

En ellas usamos la cámara del celular para escanear las zonas de la piel donde mejor se puede detectar el pulso.

Estas se sincronizan con un glucómetro. El instrumento envía sus mediciones a la aplicación y esta las procesa, analiza y archiva.

Medir la glucosa

En estos casos las apps hacen predicciones a partir de la información que se les provee con el tiempo.

Calcular ciclo menstrual

Datos como, patrones de sueño, temperatura durante el reposo, último ciclo menstrual, entre otras.

Este mismo principio rige a las aplicaciones que se utilizan para  diagnosticar factores de riesgo de ciertas enfermedades y a superar condiciones como el tabaquismo.

Tengamos en cuenta, ante todo, que ninguna aplicación, teléfono, reloj o cualquier aparato, por milagroso que sea, va a reemplazar el dictamen de un profesional de la salud.