Tras un mes de la muerte de Juan de Jesús Abril Montenegro (87 años), debido a la salvaje golpiza que recibió en una vivienda del barrio Rincón de Santa Fe en Soacha, sus familiares, quienes todavía no se reponen del dolor por su infame crimen en medio de un hurto, piden a las autoridades que se haga justicia, pues el victimario sigue rondando las calles como si nada.

Q’HUBO habló con uno de los dolientes, quien contó detalles de este abominable caso, que hoy los tiene golpeando puertas para que el asesino sea capturado.

El crimen

Según el relato del allegado a Juan de Jesús, los hechos se registraron el pasado 20 de febrero en una de las viviendas ubicadas en la diagonal 37 con carrera 14. Allí, según se observa en videos de cámaras de seguridad, a eso de las 4:38 p. m., un sujeto, al parecer en condición de calle, aprovechó que la víctima había dejado la puerta abierta para ingresar y cometer el infame hecho.

“Él vivía en Ciudad Verde, pero le gustaba ir a la casita; era carpintero, dejaba la puerta abierta para que la gente que lo conocía supiera que estaba allí, por si necesitaban algo. La casa siempre estaba sola, el inquilino sale desde temprano y llega en la noche, y los señores a los que les tenía arrendado para guardar una carreta en el primer piso trabajan hasta las 5:30 p. m., por eso se dieron cuenta”, dijo el familiar.

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El criminal duró al menos 28 minutos dentro de la vivienda, tiempo que usó para golpear brutalmente a Abril Montenegro y robarle algunas de las pertenencias.
“Cuando el señor de la carreta con la hija llegaron y vieron a Juan, llamaron a la hija para avisarle que él había tenido un accidente. Juan estaba tirado en el piso y con mucha sangre, tanto que parecía que se hubiese metido a una piscina; los papeles estaban tirados y la cajita de dientes. Se pensaba en ese momento que se había caído, pero la cara de él estaba deforme, por la cantidad de golpes que recibió; lo golpearon con una piedra”, relató ayer a Q’HUBO un familiar de la víctima.

Tras verlo malherido, los familiares y la comunidad pidieron una ambulancia, pero esta finalmente no llegó y tuvieron que trasladarlo por sus propios medios al centro médico.

“La hija tomó la decisión de transportarlo en vehículo particular. Cuando llegó el carro nos dijeron que bajáramos una cobija para no ensuciar el carro, y cuando subimos nos dimos cuenta que una puerta de una de las habitaciones del segundo piso estaba rota, como si le hubiesen dado un patadón. Vimos que el segundo piso estaba revolcado y Juan, en el momento que estaba tirado en el piso, señalaba hacia arriba, quizás para darnos aviso que algo había pasado allí, por eso supimos que había sido un robo”, dijo el doliente.

Juan de Jesús fue trasladado al Hospital cardiovascular, donde estuvo en Cuidados Intensivos, hasta que partió de este mundo el 26 de febrero.

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“En esa casa no había nada de valor, se le robaron ropa, el celular y las llaves de la casa. Pedimos que se haga justicia. Si las autoridades hubiesen actuado en el momento, el sujeto hubiese sido capturado, pero este pasó unas cuatro ocasiones después frente a la casa y un vecino se dio cuenta que una de esas veces se echó la bendición”, agregó el doliente.

Pese a que en un primer momento el caso quedó como algo accidental, finalmente dice la familia que se emitió una orden de captura contra el agresor, quien sería conocido en el sector como ‘El Costeño’.

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