Varios menores que jugaban en un lote baldío del barrio Jazmín Occidental, en Kennedy, hallaron dos cuerpos baleados. Esto es lo que se sabe.
Mientras la capital sigue consternada con la masacre de cuatro personas, entre ellas una menor de edad, la tarde del sábado en la localidad de Usme, un doble homicidio se perpetró en Kennedy. Allí dos hombres fueron hallados con signos de violencia sobre la mañana de este domingo.
“Sí, eso fue detrás de la montaña que encontraron a esas personas muertas, pero hasta donde sabemos ninguna persona de por aquí los reconoció, al parecer, venían de otro lado”, mencionó un reciclador en la zona.
Doble asesinato
Los homicidios en la capital son el pan de cada día, los temas más recurrentes que envuelven estos delitos tienen que ver con el microtráfico, enfrentamiento entre bandas criminales y ajustes de cuentas. Tal parece que este hecho de sangre que se registró recientemente en el suroccidente de Bogotá tiene que ver con alguna de estas problemáticas que enfrentan las autoridades.
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De acuerdo con la información preliminar sobre este homicidio, a eso de las 9 de la mañana del domingo, el instante de juego de unos niños que se encontraban en inmediaciones de la Carrera 99C con Calle 43F sur se vio opacada cuando se percataron de dos cadáveres que estaban tendidos en la zona baldía del barrio Jazmín Occidental.
La aterradora escena que vieron los niños a lo mejor quedará grabada en sus memorias, pero más de eso es tener que asimilar a tan corta edad la realidad de una sociedad violenta y hostil como la nuestra.
Ante el hallazgo, las autoridades fueron alertadas por la comunidad. Al llegar sitio lo único que quedaba por hacer era dar aviso a las unidades de criminalística para que hicieran el respectivo levantamiento de los dos cuerpos inertes.
“Una de las víctimas está sin identificar, tiene unos 30 años, tenía un tatuaje en la mano izquierda de unos signo pesos y presentaba dos impactos por arma de fuego, uno en la nuca y otro como en el hombro; la segunda víctima fue identificada como Darwin José Ramos Panfil (39 años), de nacionalidad venezolana, quien presentaba cuatro impactos por arma de fuego: uno en un hombro, y tres en la cabeza”, afirmó una fuente ayer a Q’HUBO.
Cuando se adelantaron las labores de vecindario para recolectar la información, un guarda de seguridad de la constructora que queda cerca al sitio donde fueron hallados los cadáveres indicó que en horas de la madrugada había escuchado varias detonaciones, pero que no se le hizo extraño porque en el sector es habitual escucharlas.
Por el momento, el caso se encuentra en manos de la Sijín, pero es de anotar que el occiso que está identificado presenta antecedentes judiciales. También es de resaltar que entre las hipótesis se encuentra que puede ser un tema relacionado con estupefacientes, debido a que en el vecindario ya se ha identificado esta grave problemática.
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