Este domingo Alejandro Estrada entró a ‘La Casa de los Famosos’ por algunos minutos para terminar su relación con Nataly, luego de que ella iniciara un romance con Miguel Melfi. En conversaciones con Q’HUBO Isabella Sierra contó cómo fue el dramático momento y qué opina de dicha infidelidad.
Durante la última gala de eliminación dentro de ‘La Casa de los Famosos’, se vivió un momento bastante tenso con la visita del actor Alejandro Estrada a su esposa Nataly Umaña. Aunque era una situación esperada, ya que la producción del programa había anunciado su presencia, el drama generó bastante incomodidad entre los participantes.
A pesar de que la infidelidad de Nataly con Melfi era un tema de conversación en toda Colombia, la decisión de Estrada de divorciarse tomó por sorpresa a muchos, ya que él había expresado en ocasiones anteriores que confiaba en la “estrategia” de su esposa.
Sin embargo, debido a la cercanía que la actriz tuvo con el cantante panameño en los últimos días, donde se les vio bastante cariñosos e incluso durmiendo juntos, y a las declaraciones de Nataly donde afirmaba que su matrimonio no estaba bien, Alejandro Estrada le entregó el anillo y anunció que su relación de 12 años había llegado a su fin.
Durante este incómodo momento, una de las participantes que estaba cerca de la actriz fue Isabella Sierra, quien comentó a Q’HUBO que no iba a defender lo indefendible, pero esperaba que el momento pasara para poder apoyar a su amiga.
“¡Tensión absoluta! Desde el momento en que ese hombre pisó la primera madera de esa casa. Cuando llegó donde Nataly, la situación se volvió aún más incómoda. Yo quiero mucho a Nata y obviamente no voy a defender lo indefendible, pero a pesar de todo, le tengo mucho cariño a Melfi y a Nataly. Solo quería que ese momento terminara para poder acompañarla y estar para ella”, dijo la última eliminada del reality.
En cuanto a la nueva relación, que a pesar de las críticas se mantiene firme, Sierra dijo que no la juzgaba, pero era un gusto culposo.
“Es un gusto culposo para muchos porque simplemente así sucedieron las cosas. Aprendí en esa casa a no opinar ni juzgar por las decisiones de los demás. Cada quien sabe lo que está pasando, cada quien sabe lo que está viviendo y son adultos totalmente capaces de tomar sus propias decisiones”, puntualizó.
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