Tras la desaparición y posterior hallazgo del cuerpo sin vida del pequeño Dilan Santiago, los familiares han mencionado diferentes versiones. Les contamos nuevos detalles de la investigación.
El pasado 6 de febrero, el pequeño Dilan Santiago desapareció en su casa en la zona rural de la localidad de Usme, al sur de Bogotá. En las primeras versiones del hecho, la madre mencionaba que el niño había desaparecido de manera extraña en la casa finca que ella cuidaba: “A las 12 le di almuercito y lo organicé y ya después de la 1 y media le dije ‘amor quédese un momentico acá yo traigo una leña’, y lo dejé en la motico, porque él tiene una motico de esas de juguete. Lo dejé ahí y ya cuando vine mi niño no estaba por ningún lado”.
Luego de la desaparición, la persona que inició la búsqueda fue la tía del menor, quien le avisó a los vecinos para lograr dar con el paradero de su sobrino. Posteriormente, la Policía activó la búsqueda alrededor de la vivienda del niño, además de comunicarse con su padre; sin embargo, para ese momento estas acciones fueron en vano.
El 8 de febrero un portavoz de la Alcaldía de Bogotá confirmó que habían activado la búsqueda en la zona, participando así el Cuerpo de Bomberos, el Gaula de la Policía Nacional, el Ejército Nacional y voluntariamente los vecinos. No obstante, tras hacer un recorrido de 3 kilómetros a la redonda desde el punto donde desapareció el menor, no se encontraron rastros.
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Posteriormente, tras dos días de búsqueda, el 10 de febrero un trabajador de la zona rural de Usme, quien se había unido a la labor de búsqueda, encontró el cuerpo sin vida del pequeño Dilan Santiago, dando aviso a las autoridades. “Quien da aviso de encontrar el cuerpo del menor es uno de los trabajadores que se había unido al plan de búsqueda que se tenía desde la mañana”, comentó el coronel Juan Carlos Arévalo Rodríguez, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, quien, además, preliminarmente dijo que su cuerpo no presentaba signos de violencia.
Según menciona el trabajador que encontró el cuerpo del niño, este se encontraba bocabajo y semidesnudo; por su parte, también la abuela dijo: “el cuerpo se encontró la mitad vestido, la mitad desnudo. El pañal estaba tirado, y las zapatillas y el pantaloncito, por allá en otro lado”. No obstante, no dejó de ser raro para las autoridades que el cuerpo del menor se encontrara en una zona donde ya se había revisado por un equipo de búsqueda de 150 personas.
La abuela del menor desde el primer momento sospechó del padre, Marlon Castro, quien a pesar de que ya no vivía en pareja con su hija, siempre la llamaba para preguntar por el niño. El detalle que puso en la lupa al progenitor fue que este días antes de la desaparición del infante, había amenazado con raptarlo según él por el bajo peso del niño, por lo cual hasta la misma madre del niño, Derly Yulieth, lo había culpado.
Marlon ya no vivía con Derly Yulieth por “motivos de convivencia”, situación que llevó a la madre a trasladarse a Bogotá para cuidar una finca. Pero la abuela mencionó que las cosas acabaron porque él le había pegado a su hija, razón por la cual ya tenía una denuncia ante la Fiscalía por violencia intrafamiliar. La tía que dio fuerza al testimonio de la abuela del menor, dijo: “Marlon en una ocasión llegó borracho. Ellos vivían separados porque él, borracho, le pegó a mi hermana y se alejaron desde entonces”.
Marlon, quien tenía una citación para dar su versión en la Fiscalía, tenía plazo de asistir hasta el sábado, pero no se presentó. Aun así, autoridades locales en Tolima lo interrogaron sin encontrar información, pues su versión y respuesta a las preguntas no era clara. Así lo comentó la hermana de Derly, quien manifestó que el hombre al ser entrevistado no era capaz de responder a las preguntas “…él respondía, y a los 10 minutos le repetían la misma pregunta, pero él, al responder nuevamente, decía algo diferente”, comentó.
El 11 de febrero, Marlon llegó a Bogotá en horas de la mañana para rendir testimonio a la Fiscalía, y aunque el ente aún no se pronunció, el hombre sí dio comentarios a los medios a través de CityTv: “Me desplacé para Líbano (Tolima), duré trabajando unas semanas y luego, el 31 de diciembre, fui a donde ella vivía (…) compartí con ella en la misma casa, la misma cama, y la última vez que vi físicamente a mi hijo fue el 3 de enero”, mencionando así que no tenía ninguna responsabilidad frente al caso de Dilan Santiago y que no se ha visto con la madre ni con los familiares.
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Por su parte, la madre también comentó que aún no ha podido ver el cuerpo del pequeño, y comentó: “Lo único que digo es que a la persona que haga eso, que eso no se hace, eso no se le hace a una persona inocente”, y añadio “si se querían desquitar, se hubieran desquitado conmigo, no con mi bebé”. Abriendo nuevas preguntas a la desaparición, y dandole fuerza a que el presunto responsable seria Marlon, pues declaró: “le andaba muy duro. Él lo regañaba mucho, le pegaba con la chancleta y a mí no me gustaba. Yo por eso lo dejé, porque le andaba muy duro al niño… Me escribió para decirme por qué lo estábamos juzgando y yo le dije que si él no tiene nada que ver que se presente (ante la Fiscalía)”.
Finalmente, el ente encargado de la investigación planteó organizar la hoja de ruta del niño y el porqué habría terminado en ese lugar. No obstante, aún se desconocen detalles del deceso del menor.
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