En horas de la noche del pasado lunes 20 de febrero, un joven venezolano de aproximadamente 24 años ingresó a una papelería en el barrio Mirador de la Estancia (Ciudad Bolívar) para recargar su celular. Justo en el momento en el que se encontraba dando los datos para la operación, fue interrumpido por un sujeto que de manera premeditada accionó un arma de fuego en repetidas ocasiones.
La víctima, que vestía un buzo de capota y una pantaloneta color blanco, además de unos zapatos negros, cayó sobre el asfalto frente al mostrador del local donde su vida se esfumó.
“Nos llenamos de pánico, nos escondimos y cuando nos dimos cuenta el pelado estaba en el suelo. Esto se llenó de humo negro, la policía llegó al poco tiempo”, contó ayer aún consternada una vecina.
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El homicidio…
Eran cerca de las 7:30 de la noche cuando Emiliano José Sánchez Materno acudió a una papelería en la Calle 62 I Sur con Carrera 75I para recargar su celular.
“Él entró a pedir una recarga a Tigo, estábamos comiendo y ya íbamos a cerrar porque estaba haciendo mucho frío. Llegó el pelado y me dijo: ‘vecino, regáleme una recarguita’, estaba dictándome el número y estaba mal, entonces se lo repetí y me dijo que faltaba un número. Me lo repitió y me alcanzó a dictar los seis primeros números cuando fue que sentimos la detonación”, narró con temor el encargado del local ayer a Q’HUBO.
El estruendoso sonido causó pánico entre los presentes, quienes en medio de la angustia y el temor se dieron cuenta que el muchacho yacía sobre el andén en toda la entrada del lugar.
Al poco tiempo, las autoridades acudieron al lugar y se encontraron con la lamentable escena. Al tomar los signos vitales de la víctima se dieron cuenta que este ya había fallecido. El lugar fue acordonado y el equipo de criminalística del CTI acudió al lugar para hacerse cargo del caso.
“Estuvieron hasta pasada la medianoche, recolectaron los videos de las cámaras de seguridad de la zona y cuando terminaron de hacer todo nos dijeron que podíamos limpiar”, señaló una vecina. Q’HUBO pudo conocer que la comunidad le manifestó a las autoridades que Emiliano laboraba en una zapatería del sector y que, además, al parecer estaba metido en problemas, pues según dijeron en este punto del sur de la capital se han venido presentando enfrentamientos entre colombianos y venezolanos por el control de la venta de estupefacientes.
También se conoció que los victimarios de este muchacho le estaban siguiendo los pasos, ya que los delincuentes que se movilizaban en una moto lo siguieron hasta el lugar y aprovechando el momento propicio, el parrillero se bajó para acercarse hasta Sánchez Materno y propinarle varios disparos a sangre fría.
“Según dicen los sujetos que iban en moto arrancaron y hasta se alcanzaron a cruzar con los policías que venían al punto, pero los policías como no sabían siguieron y los maleantes se volaron”, señaló la comunidad.
Mientras los residentes de este lugar permanecen con los pelos de punta y pegados al techo, las autoridades se encuentran investigando para poder dar con los responsables y esclarecer las motivaciones de estos asesinos para segar la vida de Emiliano.
“Aquí los vecinos nos conocemos, este lugar es tranquilo, uno se entera de cosas malas pero por allá en otras zonas cercanas, aunque realmente en este punto es la primera vez que ocurre algo así”, puntualizaron los moradores.
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