La familia de Andrés Gilberto Jiménez se encuentra devastada tras su muerte luego de que al parecer unas mujeres lo drogaran para robarse los objetos de valor en su vivienda. Este doloroso caso se registró el pasado 31 de diciembre en el barrio Porvenir II sector, en Usme.
En medio del dolor que enfrentan los familiares del joven de 27 años, hoy sacan fuerzas para denunciar lo sucedido y pedir a las autoridades que agilicen la investigación para dar con las responsables, y que este crimen no quede impune.
“Mi hermano salió el viernes en la noche a departir con unos amigos en el Restrepo, cuando se acabó la rumba, como a las 2 de la mañana, se vino para la casa. Me imagino que conoció a unas mujeres, yo pienso que ellas lo drogaron a él y a los amigos en el lugar, porque cuando él llegó se ve en las cámaras que estaba mal. Llegaron con ellas a la vivienda, se escuchaba música y después sobre las 6 de la mañana las mujeres salieron con los objetos de valor y los dejaron drogados, nosotros creemos que a mi hermano le dieron una sobredosis que terminó acabando con su vida”, señaló Carlos, hermano de la víctima.
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El crimen
Es triste ver como los delincuentes van haciendo de las suyas generando sufrimiento en sus víctimas, algunos por conseguir lo que quieren no les importa matar a costa de unos cuántos pesos que a la hora del té no valen lo que vale una vida. Este nuevo año la familia de Andrés está viviendo el dolor de perderlo y todo por cuenta de unas mujeres que lo más seguro es que pertenezcan a alguna organización criminal dedicados a robar.
De acuerdo con el testimonio de los familiares, Andrés salió de su casa a eso de las 8 de la noche del viernes con la intención de festejar que le había ido bien en la universidad, pues era estudiante de contaduría pública, y también para compartir con sus amigos antes de terminar el año, pues al día siguiente estaría celebrando con sus seres queridos.
“Mi hermano estaba terminando su carrera, tenía muchas metas y sueños, le bajaron el precio del semestre porque le había ido bien, trabajaba en una empresa de seguridad. La casa es una casa familiar, el vivía en el tercer piso. Ese día mi mamá le dijo que no saliera, pero él quería compartir con los amigos, él regresó como a las 3:30 de la madrugada, yo le escuché y pues uno ya queda tranquilo que llegara. A eso de las 6 cuando me iba a trabajar, escuché que él seguía ahí compartiendo, entonces no subí y me fui”, dijo el hermano.
Cuenta el familiar que Andrés llegó a la casa con tres mujeres y sus dos amigos y que en la mañana, a los 20 minutos que él salió, las mujeres que estaban con su hermano salieron del lugar, como se ve en videos de cámaras de seguridad. En las imágenes se observa a las mujeres subirse a un taxi, al que habían llamado y que sería su cómplice.
Entretanto, cuando la mamá de Andrés fue a llevarle su almuerzo a eso del mediodía se dio cuenta que su hijo estaba morado y sin respiración. El desespero se apoderó de ella e inmediatamente, los demás familiares se alertaron y una de sus hermanas, intentó brindarle los primeros auxilios, pero lastimosamente ya no había nada por hacer.
“Los amigos seguían drogados, lo único que uno de ellos pronunció fue: “no puede ser que mataron a Andrés”, se cogía la cabeza y se sentó. Luego cuando llegó la policía se los llevaron. Él no era de tomar en otro lado, pero ese día no sé por qué le dio por salir, se fue, fue a traer la muerte, no entendemos qué pasó, por qué se trajo a esas mujeres”, relató la mamá.
Por lo pronto el caso se encuentra en investigación y aunque los familiares saben que nada les devolverá a Andrés, esperan que el caso no quede impune y que más familias no tengan que pasar por el mismo sufrimiento.
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