Sicarios acabaron con la vida de un joven de 22 años en Usme.
En el barrio Danubio Azul de la localidad de Usme ocurrió un hecho violento a plena luz del día que dejó a la comunidad atemorizada. En un sector comercial fue ultimado con arma de fuego un joven venezolano de 22 años.
“Se escucharon como cinco tiros, y cuando vimos el pelado estaba en el andén boca arriba. Estaba vestido con una gorra negra, una chaqueta clara, camiseta y una pantalón negro”, señaló la comunidad.
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El crimen
La víctima de este crimen, Daniel Jesús Hernández (22 años), de nacionalidad venezolana, se encontraba a eso de las 3 de la tarde de este jueves caminando por la Calle 56 Sur con Carrera 4 cuando de un momento a otro fue sorprendido por un sujeto en una motocicleta color negro que desde el vehículo desenfundó un arma de fuego y la accionó contra su humanidad.
Posteriormente, de acuerdo con algunos testimonios recolectados por las autoridades, el gatillero se bajó de la moto y se aproximó a Daniel para rematarlo en el suelo.
“Le pegó los tiros en la cabeza al muchacho, en toda la esquina de la cuadra, delante de las personas que estaban pasando por el lugar. Muchas personas vieron la manera tan sanguinaria como mataron a ese pelado”, dijo un comerciante de la zona.
Entretanto, mientras el sicario tomó la moto y arrancó para recoger a dos sujetos que lo esperaban a poca distancia, los policías del cuadrante que escucharon el estruendoso sonido de las detonaciones, acudieron al lugar para verificar qué había sucedido, según manifestó la comunidad.
“Los policías llegaron en la moto y vieron ya al joven en el suelo sin vida, entonces dieron el aviso y al rato llegó criminalística”, dijo una vendedora informal.
Cuentan en este lugar que ante la mirada de la comunidad, las unidades de criminalística hicieron el levantamiento y la inspección al cadáver, mientras que las autoridades hacían una búsqueda de los criminales.
Por el momento el caso se encuentra en investigación y no hay capturas. De otro lado, en la zona manifestaron que el joven trabajaba en una peluquería a unos metros de donde ocurrió su asesinato, además de esto que no llegaron familiares, pero sí algunos amigos que manifestaron que Daniel era un joven trabajador y que al parecer no era de meterse en problemas.
“No llegó familia, decían que al parecer vivía solo. Unos amigos llegaron, los que trabajaban con él”, dijo la comunidad.
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