Agitado y tratando de contener el último suspiro, vieron agonizar en un andén a un joven la tarde de este viernes en una cuadra de Brasilia segundo sector (Bosa). La madre llegó corriendo y con sus manos le sobaba el pecho mientras esperaba la anhelada ayuda. Minutos antes, dos sujetos lo habían baleado sin mediar palabra.

A plena luz mataron a José Pérez Fuentes, un joven de 24 años de edad. Sucedió cuando el muchacho estaba a punto de voltear la esquina en su trayecto a la casa, a la cual dicen los vecinos, se había mudado hacía ocho días. Las autoridades investigan un probable ajuste de cuentas. Apenas daba la 1:05 de la tarde.

Crimen en la cuadra…

Ayer una caravana de la policía de Bosa se parqueó justo en la esquina donde la sangre de Pérez todavía sobresalía en el andén. Da sobre la Calle 49D Sur con Carrera 88H. Estaban repartiendo volantes informativos para prevenir homicidios como el ocurrido el día anterior. En la campaña, los vecinos recordaron los intensos momentos en que asesinaron a este muchacho.

“Sonaron como cuatro tiros ¡Qué terror! Yo esperé que pasara un poco el alboroto y me asomé a la ventana. Ahí fue que vi al muchacho, pobrecito estaba tratando de moverse, se retorcía y la mamá llegó desconsolada, lo tocaba, lo miraba pero estaba muy grave, le dieron directo en la cabeza”, relató ayer a Q’HUBO una vecina que presenció el hecho de violencia.
Cuentan que mientras la madre lloraba y el joven, vestido con jeans claros y camiseta gris, agonizaba, llegó la tan esperada ayuda: “un bicitaxi apareció y montaron al ‘chino’ de una. Se lo trastearon pero parece que murió porque como a los 20 minutos llegó la policía a averiguar lo que había pasado”, agregó la vecina.

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En efecto, Pérez llegó al Cami de Bosa gravemente herido. Tenía cinco heridas de bala en el rostro y cuello, el asesino se había ensañado con el joven, desocupándole casi todo el tambor del arma.

Sobre los asesinos hay varios indicios que la comunidad logró esclarecer: “dicen que fueron dos jóvenes. Cuando le dispararon los vieron corriendo a la otra esquina. Desde ahí no los volvieron a ver”, señaló otro vecino en la cuadra repleta de policía.

Las autoridades creen que el homicidio fue perpetrado por un ajuste de cuentas. Aún no es claro por qué motivos arremetieron en contra de la vida de Pérez. Lo único que los vecinos y autoridades confirman es que el joven llevaba a lo mucho una semana viviendo en una casa de tres pisos, ubicada a menos de dos casas de donde lo mataron. “Quién sabe si el muchacho tenía cuentas pendientes con otra gente, lo claro es que no lo robaron ni nada de eso, porque le fueron dando de una ¡Terrible! Las cámaras ayer fueron verificadas y se espera que con esto puedan dar con las causas de ese estremecedor crimen”.

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