Las autoridades se pronunciaron por las constantes denuncias ante el aumento de roedores en varias localidades de la ciudad.
En las últimas semanas cientos de ciudadanos de varias localidades han visto con preocupación un evidente aumento en el número de roedores que cohabitan la capital.
A través de videos ampliamente difundidos en las redes sociales se observa cómo en parques, sectores aledaños a puentes peatonales y vehiculares, esquinas que la comunidad ha tomado como vertederos de basuras y en zonas de accesos a estaciones y portales de TransMilenio, entre otros escenarios, los roedores se cuentan por docenas.
La problemática es compleja, ya que existe una corresponsabilidad entre las autoridades encargadas de velar por las óptimas condiciones de salubridad y parte de la ciudadanía, que a pesar de las campañas, los comparendos y los reiterativos llamados de atención, siguen dejando basuras en sitios prohibidos.
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Estuvimos visitando varios puntos claves en donde la ciudadanía ha reportado la presencia de roedores, especialmente cerca a depósitos de residuos que facilitan su presencia y reproducción.
Y es que el proceso de gestación de una rata común dura solo 20 días. Una hembra puede empezar a reproducirse desde los 3 meses de vida y cada camada oscila entre los 6 y los 15 individuos, con un promedio de 11 por camada. Una hembra normal, durante un año, podrá dar a luz entre 6 y 8 veces.
Es necesario, para entender el problema de la sobrepoblación de ratas, que se debe a un problema cuya responsabilidad es colectiva y que es generado, en su gran mayoría, por la irresponsabilidad ciudadana al no acatar las reglas básicas en la disposición de basuras, tanto en casa como en el espacio público. Las ratas siempre han cohabitado las ciudades en las que vivimos y depende de nosotros que no se conviertan en un problema de salud pública.
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Los puntos críticos
De acuerdo con información obtenida en nuestros recorridos y brindada por la Secretaría de Salud, las localidades y los puntos donde se ha evidenciado mayor presencia de roedores son:
- Ciudad Bolívar: Barrio La Paz y sectores de la parte alta como El Paraíso.
- Fontibón: Portal El Dorado.
- Santa Fe: Inmediaciones del Parque Santander, barrio Las Nieves.
- Suba: Inmediaciones del Portal Suba.
- Usaquén: Barrio El Codito, terminal de transportes del norte.
- Kennedy: Inmediaciones de Corabastos.
- Bosa: Barrios La Paz y María Emma.
- Usme: Barrios Alfonso López y sectores aledaños a la avenida Caracas.
¡Pilas con el veneno!
El veneno que utiliza el Distrito para combatir las ratas es un anticoagulante que actúa sobre el torrente sanguíneo del animal, una vez este lo haya consumido por vía oral. Pasadas 48 horas el animal empieza a presentar una fuerte hemorragia que lo debilita y le diezma su capacidad energética hasta que llega el lento y tortuoso deceso.
El animal generalmente muere de una falla cardíaca. Es importante anotar que este veneno actúa de igual manera sobre cualquier ser vivo que lo consuma, razón por la cual las autoridades recomiendan tener cuidado en los paseos diarios que usted realice con sus mascotas, así como no perder de vista los movimientos de los más pequeños de la casa cuando se encuentren en parques o en vía pública, en donde se estén realizando estas matanzas.
¿Cómo evitarlas?
La solución sigue siendo simple, pero aún así no se pone en práctica: con respetar los espacios destinados para las basuras y los horarios acordados por la empresa encargada de la recolección se podrían evitar, en su gran mayoría, las infestaciones de roedores.
En los barrios que Q’HUBO visitó la mañana de ayer evidenciamos, sin excepción, que los puntos críticos en donde más presencia de ratones hay responde a puntos que la comunidad ha destinado como vertederos ilegales de escombros y residuos. La correcta separación de las basuras es otra de las claves que el grueso de la ciudadanía podría implementar efectivamente, con esto se lograría, además de una correcta estrategia de reciclaje, una reducción sustancial de la presencia de roedores.
Las alcantarillas y los desagües, lugares que facilitan el tránsito de ratas, se taponan y causan que los miles de individuos que allí habitan salgan a vía pública y causen el lío en el que hoy están metidas varias localidades.
Respetar los sitios de recolección
“Nuestra labor como UAESP (Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos) tiene que ver con que se cumplan las frecuencias de los operadores. Usted, ciudadano, nos debe colaborar separando residuos, no rasgando las bolsas y no acumulando residuos en sitios públicos porque esto incentiva la presencia de roedores. Por otro lado, la Uaesp dispone de la línea 110 para que la ciudadanía informe lugares que necesiten de recolección o de podas para poder controlar los roedores”. Juan carlos lópez Director de la Uaesp.
La responsabilidad es colectiva
“Desde la Administración Distrital somos conscientes de las quejas ciudadanas por presencia de roedores en distintos puntos de la ciudad. Reconocemos que hay un problema y hemos venido trabajando para prevenir y atacar este tipo de fenómenos. Pero la proliferación de roedores exige de la colaboración de cada uno de nosotros. Tal vez el mayor factor de riesgo tiene que ver con la disposición de los residuos orgánicos”. Alejandro Gómez, Secretario de Salud.
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