En una tienda del barrio San Diego, ubicada en un concurrido sector residencial en la localidad de Bosa, varias personas se encontraban departiendo la noche de este viernes.

En una de las mesas, un par de amigos se estaban tomando unas cervezas mientras departían en tranquilidad.

Cuando el reloj marcó las 8:30 de la noche, un tercer hombre irrumpió en la mesa donde se encontraban Luis Ernesto Ovalle y Luis Aguirre Bermúdez y tras identificar a los hombres, sin mediar palabra, desenfundó un arma de fuego que llevaba consigo y les disparó a quemarropa.

Ambos hombres fallecieron poco tiempo después en un centro asistencial cercano.

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Los hechos…

El establecimiento comercial donde departían los hoy occisos está ubicado sobre la Calle 85A sur con Carrera 78, en una de las manzanas residenciales del barrio San Diego.

Para las autoridades aún es un enigma la razón por la que se presentó el ataque, sin embargo, una de las hipótesis sostiene que el ataque se debió a una venganza por viejas rencillas que tenían los occisos, dado que el atacante fue directamente hacia ellos.

“Cuando eso pasó yo venía llegando al barrio, me enteré fue porque me llamaron a advertirme que tuviera mucho cuidado porque se había formado un problemón por acá y acababan de matar a dos. Por acá siempre es caliente, entonces cuando llaman a prevenir es porque de verdad es grave. Cuando yo llegué la policía estaba acordonando el sitio y se estaban llevando a los dos heridos porque todavía tenían signos vitales. Luego ya fue que dijeron que habían muerto”, le dijo ayer a Q’HUBO una vecina que vive a menos de una cuadra del sitio del fatal ataque.

Cuando los hombres cayeron heridos de muerte, cada uno con un disparo en la cabeza, en cuestión de minutos una muchedumbre se formó en torno a los hombres baleados mientras el sicario escapaba impune por los estrechos callejones del sector.

La policía fue alertada al instante y una vez arribaron al sitio y evidenciaron que ambos tenían signos vitales, los trasladaron de urgencia al Cami de Bosa.

A los pocos minutos , el personal médico del centro asistencial confirmó el deceso de Luis Ernesto Ovalle Ariza de 34 años y de Luis Aguirre Bermúdez, de 37. Las gravísimas heridas los dejaron sin posibilidades casi que instantáneamente.

Las autoridades se encuentran recaudando material fílmico de cámaras de seguridad de viviendas y locales comerciales del sector que habrían captado al sicario mientras huía después de haber disparado contra la humanidad de los dos hombres.

“Acá ahora todo el mundo tiene un arma, pasa cualquier cosa y todo lo solucionan a bala, esto por acá está muy jodido y la gente es muy intolerante, no se le puede decir nada a nadie porque cualquier cosita puede desencadenar una tragedia.

Necesitamos más ayuda del distrito y la policía, nos sentimos acorralados por los hampones”, nos contó ayer un vecino visiblemente afectado por lo sucedido.

Se espera que con el acerbo probatorio recaudado por las autoridades se logre la captura del asesino en los próximos días.

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