A plena luz del día de este martes, en una de las calles concurridas de San Victorino, un hombre de 39 años fue vilmente apuñalado a traición por un sujeto, quien se le abalanzó por la espalda en cuestión de segundos y frente a varias personas que a esa hora se encontraban caminando por el sector.

Tras el infame ataque la víctima, que fue identificada como Jonás Joel González, un venezolano que llevaba más de cinco años trabajando en Bogotá como vendedor informal de gafas, fue trasladado a un hospital, donde infortunadamente falleció.

“Unos dicen que lo mataron por unas gafas. Dizque un sujeto le pidió unas gafas a la víctima y como él le dijo que no, entonces este se enfureció y lo apuñaló por la espalda. El homicida llevaba poco tiempo en este lugar como retacador”, contó en medio de su dolor un allegado de Joel.

Puñalada letal en San Victorino:

El dolor que hoy sienten los familiares y allegados de Joel es inexplicable, aún no salen de su asombro tras el terrible suceso que se perpetró a eso de las 10 de la mañana de este martes en la Carrera 10 con Calle 11 y que lamentablemente dejó como saldo su muerte.

Q’HUBO pudo conocer el video de la cámara de seguridad de un local comercial de esta zona, donde se puede observar el momento exacto en el que el criminal comete el brutal asesinato.

En las imágenes se puede ver cuando Joel estaba sentado al lado de su puesto ambulante, hablando por celular, cuando en cuestión de segundos se puso de pie, mientras su agresor lo observaba. Posteriormente, dio la espalda y el criminal, empuñando un arma cortopunzante, se le abalanzó y le propinó una puñalada en el cuello.

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“El criminal intentó huir y los mismos vendedores lo acorralaron. Él se metió a un negocio, la Policía llegó rápido y lo sacó del lugar esposado, evitando que la comunidad lo linchara”, contó uno de los amigos del venezolano.

Mientras las autoridades capturaban al victimario, Joel era trasladado en un taxi hasta el Hospital Santa Clara, donde -según contó entre lágrimas su pareja sentimental- lo sentaron en una silla y le colocaron suero, mientras él agonizaba.

“No lo atendieron realmente como era, lo sentaron y le pusieron un suero, sin mirarle la herida en el cuello. Él se murió esperando a que lo atendieran. Cuando por fin lo llamaron, dijeron que ya no tenía pulso. En la silla él me decía que le dolía, duró una hora y media esperando hasta que empezó a convulsionar y a botar mucha sangre. Él solo me decía que le apretara la herida. Cuando lo subieron a la camilla ya no tenía vida. Ellos decían: ‘lo estamos perdiendo, no hay pulso’, fue algo demasiado duro”, contó entre lágrimas la pareja sentimental.

Tristemente, Joel partió de este mundo no sólo como víctima de una infame agresión, sino también, como denuncian sus allegados, de una negligencia médica.

Por el momento Joel, quien era oriundo de Maracaibo, será trasladado a su tierra natal. Entre tanto, sus amigos y allegados, que se encuentran sumidos en un profundo dolor, esperan que se haga justicia y el asesino no vaya a quedar en libertad.

¿Por qué se originó el crimen?

Pese a que algunas versiones dicen que él sujeto se molestó con Joel porque no le prestó unas gafas, sus amigos aseguran que no creen en esta versión, pues en las imágenes se observa que en ningún momento ellos cruzaron palabra; además, creen que esto estaría relacionado con una amenaza que él recibió hace algunos meses atrás.

“Joel no era problemático ni nada de eso, pero en octubre se presentó una situación, pues una señora se ubicó en el lugar donde él ponía su puesto ambulante. Entonces, él la sacó de allí y la señora, antes de irse, le dijo que lo iba a mandar a joder y no se sabe si de repente puede ser eso. Yo tengo la hipótesis de que el asesino llevaba un día y medio de trabajo y de una vez llegó fue a matarlo”, contó un amigo.

Por su parte la pareja de Joel, estando en el hospital, le preguntó a su amado qué había sucedido, pero él solamente le respondía que no tenía idea por qué este hombre lo había agredido y que estaba muy sorprendido.

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