A a la orilla del río Tunjuelo apareció en la mañana de ayer el cadáver de una mujer. Su cuerpo estaba semidesnudo, solo portaba una camiseta que le cubría el rostro. El cauce del río la habría arrastrado hasta ese cúmulo de piedras que arropan el tramo del río, que colinda con la Calle 71 sur con Carrera 3J (sentido Sur-Norte), justo detrás del botadero Doña Juana.
El misterio ya se había esparcido por entre los conductores y ciclistas que pasaban por la avenida. Una gran multitud se acercó al pequeño puente por el que se abre paso el río. Tanto las unidades de Bomberos, como la Policía hicieron presencia y tuvieron que ocupar gran parte de la vía para realizar las labores investigativas, razón por la cual se generó un monumental trancón hasta entrado el mediodía.
Tenebroso hallazgo en el río Tunjuelito:
Un reciclado y habitante de calle dormía plácidamente en su cama improvisada a la orilla del río Tunjuelo, cuando un oficial se le acercó y lo despertó con estas palabras: “¡Pero qué! Le tiran los muertos al lado de su casa y ¡ni se da cuenta!”, el reciclador se despertó asustado y preguntó boquiabierto: “¿un muerto, cómo así?”. Hasta que su mirada se posó en el punto donde reposaba el cuerpo sin vida de una mujer, que flotaba cerca a las piedras del río.
Era un hallazgo desgarrador. Ocurrió sobre las 8:40 de la mañana de ayer, hora en que el cadáver fue avistado. Por contados metros, a las autoridades de Ciudad Bolívar les fue asignado el caso y prontamente se acercaron al sitio para investigar el lamentable hallazgo. Al inicio era incierta la sexualidad de la víctima, hasta que las labores de levantamiento avanzaron con el fin de la mañana.
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“Yo siempre he dormido aquí, a la orilla del río, y nunca me había enterado de una vaina así. Los agentes me levantaron con esta noticia. Yo no la creía, porque el cuerpo estaba desnudo y se confundía con el color de las piedras del río. Luego, un agente me pidió que le ayudara a sacar el cadáver a la orilla. Le amarré una cabuya y lo sacamos. A primera vista no se veía si era hombre o mujer, pero luego me cercioré de que era una mujer. Ella tenía un ‘body’ tapándole la cabeza y el pantalón sobre los pies. Se le veía un poco de sangre”, le relató a Q’HUBO el reciclador que participó en el hallazgo y el rescate del cadáver a la orilla del afluente.
Las unidades de criminalística llegaron para seguir las investigaciones. A la hora de verificar signos de violencia, hay señales que apuntan a que la mujer tendría heridas por arma cortopunzante. Otro aspecto que ayer empezó a ser investigado es la hora en que le habrían causado la muerte y el sitio exacto desde donde fue arrojada al río, ya que se maneja la posibilidad de que fuera asesinada en otro punto y arrastrada por la corriente.
El cadáver fue trasladado a Medicina Legal donde, al cierre de esta edición, seguían las labores de identificación del cuerpo e inicio de las pesquisas para detallar lo que habría detrás de este inquietante hallazgo.
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