Tres EPS están sin plata para atender a sus pacientes.
La existencia de tres importantes EPS está en peligro por cuenta de $1 billón que tuvieron que sacar de su bolsillo para atender a sus pacientes. Sanitas, Sura y Compensar le reclamaron ayer al Ministerio de Salud por unos cambios necesarios ante semejante desfinanciación.
Y no es para menos, el Gobierno se ha hecho el de la vista gorda para pagarles otros $1,6 billones de años anteriores, que comprometen su operación.
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Se metieron la mano al bolsillo
Lo primero que expresan las EPS es que en los últimos dos años han tenido que poner dinero de su capital para poder cubrir el servicio de salud. En el caso de Sura, son $400.000 millones; mientras que Sanitas ha destinado $415.500 millones y Compensar $278.700 millones. A estas las EPS se les gira anualmente un fondo llamado Unidad de Pago por Capitación (UPC), el cual este año quedó en $1’289.246, es decir $3.581,24 por día, dinero que sirve para cubrir incapacidades o la atención a enfermedades graves como cáncer o diabetes.
De acuerdo con las tres EPS, este valor es insuficiente y se requiere hacer un ajuste adicional de 5,7%, con lo cual el valor diario pasaría a ser de $3.785,37 diarios. Fuentes consultadas por Q’HUBO adviriteron que el solo pago de un profesional puede valer más de $100.000 al día,
a lo cual deben sumarse temas como medicamentos, incluidos aquellos para tratamientos especializados.
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Carga desigual
En términos prácticos, cuando una persona es diagnosticada con una enfermedad complicada, solicita su traslado a una EPS que tenga buenos indicadores de tratamiento al paciente, algo que les ha pasado a estas EPS; así las cosas, se estima que un tratamiento para el cáncer puede bordear los $200 millones al mes por persona, razón por la cual uno de los llamados más importantes al ministro de Salud, Guillermo Jaramillo, es que se modifique el valor de las UPC para que se haga un pago por tipo de enfermedad y no un valor genérico por paciente. De no hacerse dicha modificación, las EPS indicaron que se ponen en riesgo 34.000 empleos que generan estos tres prestadores de salud.
La deuda es grande…
Las EPS le echaron el ojo a los servicios que les ha tocado cubrir de su propio bolsillo y la situación es bastante preocupante, pues en el caso de Sura las deudas se acercan a los $988.517 millones, Sanitas acumularía nada menos que $2 billones de deuda y Compensar los $573.019 millones.
Aseguran que si estas deudas no se sanean, en septiembre deberán tomar medidas, a lo que la fuente consultada descarta que se declaren en bancarrota, pero sí buscarán trasladar pacientes a otras EPS o recortar gastos, por lo que sugieren al Gobierno destinar una parte del presupuesto no ejecutado para sanear la cartera antes de que crezca la crisis.
¿Es lo que quiere el gobierno?
“Este es un problema viejo, pero que se ha agravado. Estamos viendo que hay un riesgo al sistema de salud y necesitamos que de parte del Gobierno nos garantice que el sistema como está siga funcionando.
Está bien que promueva su reforma a la salud, pero no puede pasar que deliberadamente se está marchitando el sistema actual para abrirle paso a la reforma. Hoy hay personas que se están quedando sin atención por la crisis”, manifestó ayer el congresista Humberto de la Calle.
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